Islas Ogasawara (UNESCO)

Las 30 islas que configuran el archipiélago de Ogasawara ocupan una extensión total de aproximadamente 8000 hectáreas y son el hogar de más de 190 especies de aves en peligro de extinción, como el murciélago gigante de Ogasawara, más de 400 plantas autóctonas y una rica vida marina que habita sus aguas cristalinas. Explora las islas para observar de cerca los procesos evolutivos que se han dado lugar en estos apartados ecosistemas.

Las islas Ogasawara también se conocen como las «Galápagos de Oriente» por el proceso de evolución único que han sufrido, desde que se separaron de tierra firme hace milenios. Te recomendamos hacer una excursión guiada por los bosques para admirar la diversidad de flora y fauna que se ha desarrollado exclusivamente en estas islas.

Se encuentran dentro de la lista del Patrimonio Mundial, lo que les confiere su reconocimiento como gran espacio natural. En el momento de incluirlas, el Comité del Patrimonio Mundial ensalzó la incomparable diversidad de la fauna y flora autóctona de las islas.

Además de especies curiosas, el océano que rodea las islas es el hogar de una pletórica vida marina. Desde el puerto de Futami, en Chichijima , podrás surcar los mares, con un guía, para ver a los cachalotes y yubartas de la zona. Además, un micrófono sumergido te permitirá escuchar el sonido que emiten estos animales debajo del mar. O puedes disfrutar de actividades más dinámicas, como nadar entre delfines, submarinismo o kayak. Las actividades son aptas incluso para principiantes.

Otra estampa incomparable es el cielo estrellado que se puede admirar desde las islas. Las islas Ogasawara se encuentran en su mayor parte deshabitadas, por lo que la escasez de luz artificial permite observar con nitidez las numerosas constelaciones de la Vía Láctea.

Desde el embarcadero de Takeshiba, en Tokio, sube al barco Ogasawara-maru Liner, que te llevará al puerto de Futami, en la isla de Chichijima en un viaje de 25 horas. El ferri tiene un arqueo de 6700 toneladas y cuenta con cabinas tipo habitación de hotel, cafetería en cubierta —donde podrás disfrutar de un té mientras contemplas la inmensidad del océano Pacífico— y un restaurante con especialidades a base de productos de Ogasawara. El diseño está pensado para ofrecer máxima comodidad a los pasajeros.