Si eres amante de los coches, no puedes perderte esta visita para ver la fabricación de vanguardia japonesa en acción
Descubre de cerca lo último en tecnología automovilística durante una visita de 90 minutos a la planta de Oppama de Nissan, una de las más grandes del país. En esta planta en expansión se fabrican vehículos eléctricos y vehículos equipados con el sistema e-POWER.
Datos breves
Las visitas solamente están disponibles en japonés, por lo que necesitarás un intérprete
Las visitas suelen tener lugar dos veces al día, por la mañana y por la tarde, y pueden ser tanto individuales como en grupo
Durante la visita tendrás que caminar unos 20 minutos aproximadamente, siguiendo la línea de producción
En función del número de participantes, cabe la posibilidad de que formes grupo con otros visitantes
Cómo llegar
La estación de Oppama está a unos 25 minutos en tren desde la estación de Yokohama en la línea Keihin Kyuko. Para llegar desde la estación de Oppama a la planta hay que caminar 20 minutos.
Tamaño y tecnología
El recorrido comienza con una presentación en vídeo de 5 minutos. Harán una breve pero interesante presentación de la planta y sus actividades, incluido su tamaño de más de 1,7 millones de metros cuadrados, el número de empleados, que son más de 3000, y sus métodos de fabricación, que utilizan lo último en tecnología y sistemas de entrega para evitar el malgasto de materiales y tiempo. Se necesitan aproximadamente unas 24 horas para construir un coche de principio a fin.
Listos para el mundo
El recorrido incluye una vista a la zona del muelle, donde los coches se cargan en barcos para enviarlos a otros puertos de Japón y del extranjero. Si tienes suerte, verás a los conductores profesionales cargar los coches en los barcos a un ritmo de 100 coches por hora, aparcándolos a solo 10 centímetros de distancia entre ellos.
Coreografía de robots
La visita a la línea de montaje es el punto culminante del recorrido. La planta de Oppama fue la primera de Japón en utilizar robots en la línea de producción cuando introdujo los robots soldadores en 1970. Los robots siguen siendo un espectáculo asombroso de ver, ya que giran y rotan con la precisión y la gracia de un ballet automatizado.
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