Una escapada a una playa cerca de Nagasaki con delfines y un onsen
La isla de Iki, en el estrecho de Tsushima, es una visita que los apasionados del mar no pueden perderse. Situada entre Corea del Sur y la prefectura de Fukuoka, se hace difícil creer que esta pequeña isla pertenezca a la prefectura de Nagasaki.
Como la mayor parte de Nagasaki y sus bellas islas, la isla de Iki es un lugar donde disfrutar de un sinfín de playas de arena blanca y de miradores con impresionantes vistas.
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Cómo llegar
Se puede llegar a la isla en barco o avión.
Desde el aeropuerto de Nagasaki, el vuelo tiene una duración aproximada de 30 minutos.
Si no te gusta volar, puedes ir en barco. Desde la terminal de ferris de Hakata, en Fukuoka, hay dos ferris: el deslizador Kyushu Yusen, que tarda aproximadamente una hora, y el ferri Kyushu Yusen, con un viaje que dura unas 2 horas y 25 minutos.
Vayamos a explorar
La isla de Iki ofrece mucha diversión. Saruiwa, o el monte de los monos, es una de las atracciones estrella, llamado así por el parecido que tienen las rocas a estos primates. Takenotsuji, el punto más elevado de la isla a 212 metros de altitud, es la mejor manera de disfrutar de unas vistas maravillosas de la isla.
Delfines y más delfines por todas partes
A la vez que exploras la isla de Iki, por qué no te acercas al parque de delfines, una experiencia divertida e interactiva para pasar la tarde con los más pequeños. El parque tiene un divertido museo en el que podrás tener la oportunidad de dar de comer a los delfines en un extenso entorno natural.
Onsen para todos
Si la relajación es lo tuyo, entonces la ciudad-balneario de Yunomoto está hecha para ti. Con sus famosas aguas de color lodo, te sumergirás de lleno en la cultura japonesa. Con 13 baños termales repartidos por el pueblo, hay mucho donde elegir.
Aunque también puedes hospedarte en algunos de los muchos hoteles contiguos, muchos, por no decir todos o casi todos, te dejarán entrar durante el día.
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