Cascada de Naena 苗名滝

Si quieres huir del calor veraniego o admirar los colores del otoño, la cascada Naena, en la zona rural de Myoko , en la parte sur de la prefectura de Niigata, es el lugar ideal para relajarse y disfrutar de la naturaleza.

Puedes llegar a la cascada de Naena en tren o en coche, aunque esta última opción es más sencilla.

En tren, puedes tomar el Echigo Tokimeki de la línea Myoko Haneuma y bajarte en la estación de Myokokogen. Desde allí, hay otros 15 minutos en taxi.

Si vas en coche, toma la autopista de Joshinetsu y sal en la intersección de Myokokogen. Toma la línea 39 Niigata Myokokogen Park en dirección a Sasagamine. Cuando llegues al cruce de cinco vías, continúa aproximadamente un kilómetro hacia Kurohime. Gira a la derecha antes del puente y sigue el río cuesta arriba hasta el aparcamiento de la cascada Naena.

La cascada Naena es famosa por su ruido ensordecedor, cuyo eco llega hasta el bosque vecino, lo que le ha valido el sobrenombre «cascada del terremoto». Su enorme caudal brota verticalmente sin descanso por el acantilado de basalto de 55 metros de altura. Contemplar la cascada es todo un espectáculo pero, además, al disfrutar de una temperatura relativamente inferior al resto de la cordillera de Myoko, también te relajarás.

Se recomienda visitar la cascada Naena en octubre, cuando las hojas cambian de color. Si quieres escapar de la multitud y disfrutar plenamente de la tranquilidad de la cascada, merece la pena visitarla entre semana.

Es fácil llegar a la cascada Naena, ya que el sendero de 400 metros está casi todo pavimentado. Primero, cruzarás un puente colgante y pasarás por una gran presa. La segunda mitad del paseo es a través de una zona en su mayor parte plana, pero rocosa. Se tarda 15 minutos en realizar todo el recorrido.

Al final del sendero te espera un largo puente, desde el que podrás ver la cascada en su totalidad.

En verano, a los visitantes les gusta vadear o nadar en el agua cerca de la cascada. Si te animas, te recomendamos hacerlo con prudencia, ya que las corrientes pueden ser muy fuertes.

Cerca del aparcamiento que se encuentra al comienzo del paseo, hay un restaurante en el que podrás probar un plato divertido y memorable llamado nagashi-somen, fideos que se sirven deslizándose por un tobogán de bambú. Tendrás que atraparlos con unos palillos.

También hay cafeterías, máquinas expendedoras, baños y bancos en la entrada de la cascada.