Una magnífica fiesta del fuego para protegerse de la mala suerte y rezar por los hijos y por un buen matrimonio
El Festival del Fuego de Nozawa Onsen es el festival más famoso de Dosojin, una deidad de la región de Hokuriku Shinetsu, y se celebra el 15 de enero de cada invierno. Los hombres del pueblo, y en especial los que tienen entre 25 y 42 años, considerados edades de mala suerte en Japón, desempeñan un papel importante. Las llamas de las antorchas que sostienen, iluminan la noche y se produce una feroz batalla.
Un gran número de vecinos lleva antorchas e intenta quemar un santuario provisional llamado shaden, mientras que los de 25 años defienden la estructura y los de 42 años cantan y gritan. El objetivo de este festival es celebrar el nacimiento del primer hijo de una familia, rezar por su buena salud y rogar por una buena cosecha.
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Cómo llegar
El autobús lanzadera Nagano Snow ofrece una conexión directa entre los aeropuertos de Tokio, la estación de Shinjuku y Nozawa, de aproximadamente 6 horas. También circula entre Nozawa y los complejos turísticos de Hakuba y Shiga Kogen.
Otra alternativa es tomar el tren bala Hokuriku en la estación de Tokio hasta Iiyama (1 hora y 40 minutos) y luego el autobús Nozawa Onsen Liner (25 minutos). Hay autobuses directos durante el invierno desde Osaka, Kioto y Nagoya.
El festival se celebra en una plaza llamada Dosojinba, a unos 5 minutos a pie de los baños públicos Oyu, en la calle principal.
¡Encended el fuego!
En Japón, las edades de 25 y 42 años se consideran astrológicamente desafortunadas para los hombres. El festival Dosojin de Nozawa combina un rito de iniciación para protegerlos con rituales antiguos de Año Nuevo.
En japonés, el festival se conoce como Dosojin Matsuri, en honor a las deidades protectoras Dosojin a las que venera. Se cree que los Dosojin evitan las epidemias y otras diversas desgracias. A menudo, se encuentran tallados en piedras a los lados de las carreteras y en los límites territoriales de todo el centro de Japón. En Nozawa Onsen, aparecen como dos postes de madera pintados como una pareja humana.
El registro más antiguo del festival en su forma actual data de mediados del siglo XIX, pero las raíces se remontan mucho más atrás.
El día antes de las festividades, alrededor de un centenar de vecinos del pueblo construye un santuario improvisado en Dosojinba. Al comenzar el festival, los hombres de 42 años se sientan en lo alto del santuario, cantando a los Dosojin y los jóvenes de 25 años están en el fondo, sosteniendo cuerdas atadas al santuario. Cuando se acerca el momento de comenzar, gritan: «¡Encended el fuego! ¡Encended el fuego!».
En respuesta a sus llamadas, columnas de vecinos portando antorchas de caña atacan al santuario provisional, haciendo todo lo posible por prenderle fuego. Los hombres que sostienen las cuerdas tienen que proteger el santuario, pase lo que pase. Uno tras otro, los vecinos atacan, y se produce una batalla de chispas y llamas.
Tras el asedio, se prende fuego al edificio del santuario sobre las 22:00h. Al incendiarse, la fiesta llega a su fin. El fuego arde hasta el día siguiente, y mucha gente asa y come pasteles de arroz y otros alimentos a la mañana siguiente, sobre los restos del fuego. Se dice que si se asan y comen pasteles de arroz en este fuego, se vivirá con buena salud durante todo un año sin coger un resfriado.
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