Un castillo escenario de trágicos y violentos sucesos que ahora ofrece apacibles vistas de Hiroshima
Aunque la fortaleza que domina la ciudad de Hiroshima fue construida en 1958 como una réplica, el castillo original tiene una historia de varios siglos. Se construyó a finales del siglo XVI y es anterior a la fundación de la ciudad.
El castillo es actualmente un museo que recorre la historia de la ciudad antes de los bombardeos atómicos y es una fiel representación del edificio original.
Datos breves
El castillo también es conocido como el castillo de la carpa
Los cimientos miden 12,4 metros de altura y la estructura del edificio, otros 26,6 metros
El castillo de Hiroshima tiene la singularidad de estar situado en una planicie
Cómo llegar
Se puede llegar al castillo en tranvía o autobús.
Se encuentra a unos 30 minutos a pie del Parque Conmemorativo de la Paz . Si lo prefieres, puedes optar por el tranvía hasta la parada Kamiyacho-nishi o Kamiyacho-higashi y, después, recorrer los 15 minutos restantes a pie.
Un castillo moderno que honra el pasado
El castillo de Hiroshima fue destruido por la explosión de la bomba atómica que cayó en Hiroshima el 6 de agosto de 1945.
El estilo de la estructura exterior del nuevo castillo es fiel al original, aunque para la construcción de su interior se han empleado técnicas contemporáneas. En la parte superior hay un balcón corrido con vistas panorámicas de la ciudad y sus alrededores.
Tres árboles con un significado especial
El castillo no sobrevivió al bombardeo, pero sí lo hicieron tres árboles aledaños. Dentro de los muros del castillo puedes encontrar un acebo, un eucalipto y un sauce, situados a solo 740 y 910 metros del centro de la explosión.
Estos árboles emblemáticos simbolizan en la actualidad la fortaleza de la ciudad y su capacidad para sobrevivir y prosperar incluso después de un suceso tremendamente devastador.
Magníficas vistas y una asombrosa historia
El castillo, que fue construido en una posición estratégica, estaba cercado por tres fosos, uno de los cuales aún perdura, que se alimentaban del cercano río Ota, que a su vez rodea el castillo por tres lados. Gracias a esta ubicación estratégica, en la actualidad los visitantes pueden disfrutar de magníficas vistas de la ciudad y sus alrededores.
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