Monte Ontake 御嶽山

El monte Ontake, una de las montañas más sagradas de Japón, ha atraído a fieles y peregrinos durante más de mil años. Cuenta con paisajes espectaculares, una antigua ruta de peregrinación y un centro espiritual dedicado a la naturaleza que ha pervivido hasta hoy.

Kiso-Fukushima es la estación principal más cercana a la ruta de senderismo de la montaña, que conecta directamente con Nagano. Para llegar y moverte por la zona sin coche necesitas planificación y organización.

Toma la línea JR Shinano en la estación de Nagano, hacia la estación de Kiso-Fukushima. En la estación de Kiso-Fukushima, toma un autobús hacia Tanohara y baja en la última parada para acceder a la ruta de senderismo. Solo hay tres autobuses al día.

Otra opción es tomar el autobús que lleva al teleférico de Ontake y montarte en una de sus cabinas. Y disfruta de un recorrido de 2330 metros en teleférico por la montaña.

El monte Ontake se considera un lugar sagrado desde tiempos ancestrales. La religión que aquí se practica es una mezcla de sintoísmo, budismo esotérico y una antigua tradición chamánica. Aún hoy en día vienen fieles de todo Japón para recorrer el sendero de peregrinación de Ontake hasta la cima. En julio y agosto, te encontrarás con peregrinos vestidos de blanco celebrando ceremonias en los lugares sagrados que hay a lo largo del camino.

Si bien hay una ruta que empieza a los pies de la montaña en Kiso, solo unos pocos la hacen entera hoy en día. La mejor manera es subir con el teleférico de Ontake, desde donde queda una caminata de dos horas hasta la cima.

Recorre el paisaje lunar volcánico y visita los muchos santuarios y los estanques sagrados del monte Ontake. El recorrido por toda la cumbre puede llevar entre cinco y seis horas. Durante la temporada de peregrinación, hay alojamientos donde te puedes hospedar.

El otro camino de peregrinación a Ontake empieza en el apartado pueblo de Otaki, donde se encuentran dos de las cascadas más sagradas de la región, Kiyotaki y Shintaki. Durante siglos, peregrinos vestidos de blanco permanecían debajo de estas cascadas para purificarse antes de ascender al monte Ontake.

Aunque se puede acceder a cualquiera de las dos cascadas directamente, vale la pena hacer el recorrido de una hora y media por el sendero de las cascadas de Ontake. El camino penetra en el precioso bosque de la montaña, lleno de santuarios y dedicatorias, cubiertas de musgo, a las divinidades. De camino a las cascadas, te parecerá que entras en otro mundo, sobre todo si te encuentras con los peregrinos realizando sus cantos y rituales.

Si visitas Kiso en invierno y quieres practicar algún deporte, en el monte Ontake encontrarás las estaciones de esquí de Ontake Skijo, en el pueblo de Otaki, y de Kaida Kogen Maia. Ambas son bastante pequeñas, pero suficientes para pasar un día divertido en la nieve. Incluso podrás decir a los amigos que has esquiado por el volcán más alto de Nagano.