Palacio Imperial de Kioto 京都御所

El Palacio Imperial de Kioto, o Gosho, es la antigua residencia de la familia imperial japonesa. Hoy es un espectacular punto de referencia en el mismo centro de Kioto.

El palacio fue la residencia de la familia imperial japonesa durante los diez siglos que Kioto fue la capital nacional. En 1868, la familia se trasladó a Tokio, la nueva capital. Hoy los visitantes pueden explorar libremente los terrenos del palacio, porque antiguamente eran visitas de pago guiadas.

Al Palacio Imperial de Kioto, o Gosho, se accede fácilmente en tren.

Desde la estación de Kioto, toma la línea Karasuma hasta las estaciones de Marutamachi o Imadegawa.

El palacio que hoy vemos es la reconstrucción que se hizo en 1855, después de que las llamas arrasaran la estructura anterior. El conjunto está rodeado por una gran muralla. Los edificios que conforman el palacio incorporan elementos arquitectónicos de distintos períodos históricos de la ciudad.

El Palacio Imperial es una de las dos principales instalaciones del parque Imperial de Kioto. La otra, el Palacio Imperial Sento, alberga el Palacio Omiya, donde se alojan los miembros de la familia real en sus visitas a Kioto.

La estructura original del Palacio Imperial Sento se construyó en 1630, pensada para que fuera la casa de retiro del emperador Gomizuno y terminó siendo la residencia permanente de todos los emperadores retirados. El fuego lo arrasó en 1854 y fue sustituido por el Palacio Omiya.

Los visitantes pueden acceder libremente al palacio dos veces al año: a finales de abril y a mediados de noviembre.

Para visitas gratuitas el resto del año, incluso en inglés, dirígete a la Agencia de la Casa Imperial en el parque del Palacio Imperial de Kioto. Solo tendrás que rellenar un formulario y mostrar el pasaporte. Si lo solicitas a primera horas de la mañana, puede que incluso se te permita el acceso ese mismo día.