TOCHIGI Ashikaga Dominada ahora por las flores, albergó la escuela más antigua de la nación y un clan que en su momento gobernó Japón
Dominada ahora por las flores, albergó la escuela más antigua de la nación y un clan que en su momento gobernó Japón
Ashikaga es una pequeña localidad tranquila situada en la prefectura de Tochigi , famosa principalmente por sus tejidos de seda, un parque en el que contemplar las flores es una experiencia mágica y un pasado histórico relacionado con un importante clan shogunato.
Una concentración de flores sin igual
El parque de flores de Ashikaga ofrece una experiencia visual y olfativa única en el mundo.
Este parque, famoso principalmente por sus glicinias —y el túnel natural de tonos lavanda, rosa, azul y blanco que forman—, es un extenso jardín de más de 10 hectáreas en el que se pueden contemplar diversas especies florecidas según la estación. En él se celebran además diversos eventos a lo largo del año, entre los que destaca la iluminación de las glicinias en el que las flores adquieren un aspecto aún más extraordinario.
No te pierdas
- El parque de flores de Ashikaga y sus extensos campos de glicinias iluminadas
- Una visita a la escuela Ashikaga Gakko, la más antigua de Japón
- Degustación de vinos japoneses en la granja y bodega Coco Farm & Winery
Cómo llegar
A Ashikaga se puede llegar fácilmente desde Tokio en tren o autobús.
Desde Tokio, toma el tren rápido limitado en Kita-Senju o Asakusa con destino a Akagi y bájate en la estación de Ashikagashi.
El templo natal del shogunato Ashikaga
En Ashikaga nació un shogunato del mismo nombre que dominó Japón durante 237 años, desde el 1336 hasta el 1573. Sus líderes establecieron fuertes relaciones con Corea, y fomentaron tanto nuevas formas de expresión artística —como el teatro Noh, la ceremonia del té o los arreglos florales— como la práctica del budismo Zen.
El templo Bannaji, en su día la residencia del fundador del clan, Ashikaga Yoshiyasu (1127-1157), conserva en la actualidad el estilo típico de las residencias de guerreros, caracterizado por la presencia de un foso, un muro y un diseño de cuatro puertas. Los amplios jardines del templo albergan además un campanario, una biblioteca y otros edificios. Además, están repletos de cerezos y hay un árbol gingko que, según parece, lleva en pie aproximadamente seis siglos.
La escuela más antigua del país
Ashikaga Gakko es la escuela más antigua de Japón, y fue fundada en el año 1439 por un gobernador de Kanto llamado Uesugi Norizane. En el año 1549, el misionero Francisco Javier la describió como la universidad más grande y famosa de Japón. En ella se han impartido materias tan diversas como el confucianismo, la medicina china, técnicas de adivinación e incluso estudios militares. Cuenta con más de 18 000 volúmenes de libros así como algunos de los documentos históricos más antiguos del país.
El paisaje que ofrece el lugar ya es digno de visita, y se puede apreciar la paz y la tranquilidad que se podía respirar a la hora de estudiar aquí. También son interesantes las cocinas, las salas de estar y demás instalaciones. La escuela Ashikaga Gakko está a poca distancia a pie de la estación de Ashikaga.
Fresas, soba y vino
La prefectura de Tochigi es especialmente famosa por sus grandes fresas dulces, algo que explica que se haya autoproclamado como «el reino de las fresas». En esta prefectura se producen más fresas que en cualquier otro lugar de Japón, y en muchas plantaciones de la zona se puede participar en la recolecta.
Otra especialidad de Ashikaga son los fideos soba, un plato que podrás degustar de diversas formas dependiendo de la estación del año en que lo hagas. Lo peculiar de este tipo de fideos es que los alimentos utilizados para dar sabor no se agregan al caldo de la sopa, sino que se mezclan directamente durante el proceso de amasado.
Al norte de la ciudad se encuentra la bodega Coco Farm & Winery. La bodega utiliza uvas japonesas y levadura silvestre para producir vino, y los vinos de alta calidad se sirven en conferencias internacionales y en vuelos internacionales. La tienda de vinos ofrece visitas a la bodega y catas, y en la cafetería se puede disfrutar de vino casero y platos de temporada.
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